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miércoles, 4 de enero de 2012

EL PROYECTO EMPRESARIAL: Idea y objetivos


Antes de plantearte seguir o no con esta aventura, deberías tener la certeza de que el proyecto en el que estás pensando te atrae, te motiva, te divierte, te gusta.
¿Qué responderías a las siguientes preguntas?:

- ¿Es un proyecto atractivo?
- ¿Me hace feliz pensar que lo voy a desarrollar?
- ¿Me siento capaz de superar las dificultades?
- ¿Tengo ganas de empezar con el proyecto?
- ¿Considero que me voy a divertir llevándolo a cabo?
- ¿Tengo puestas todas mis ilusiones en él?

Si estás respondiendo de forma positiva a estas preguntas: ¡ADELANTE!

Valoración de la idea:
Lo primero que hay que hacer para empezar a pasar de la idea a algo más concreto es plasmarla en un documento. La idea hay que contarla, ESCRIBIRLA de manera simple y comprensible, más adelante se podrá formular el Plan de Empresa.

Bien, y ahora, te estarás preguntando ¿y qué escribo?..............muy fácil, intenta contestar a las siguientes preguntas y podrás confeccionar un pequeño documento sobre el que anotes de forma ordenada la idea de negocio que tienes:

- Producto/ Servicio: ¿Qué vamos a ofrecer? ¿Cuál es nuestro producto/servicio?
- Mercado: ¿A quién?
- Plan producción: ¿Cómo lo vamos a hacer?
- Plan comercial: ¿Cómo lo vamos a vender?
- Plan de recursos humanos: ¿Qué competencias debemos reunir el equipo de trabajo?
- Misión de la empresa: en definitiva ¿Cuál es nuestro negocio?

Una vez analizados los datos básicos de la nueva empresa habrá que acercarse más al mercado y poder contestar “Sí” a casi todas estas preguntas:
- ¿Estoy satisfaciendo nuevas necesidades en  el mercado?
- ¿Mi producto es, de alguna manera,  diferente al de la competencia?
- ¿Me dirijo a un nuevo mercado, hasta ahora inexistente?

Una vez definidas las características generales del proyecto habría que reflexionar sobre cuáles son los objetivos que perseguimos. Estos deben de ser claros y estar perfectamente trazados.
Es importante tener los objetivos claros y creer en ellos, sino va a ser duro mantener la motivación en los momentos difíciles.

Tus objetivos pueden ser a nivel personal, tus propias metas personales:
• Buscas la autorrealización emprendiendo.
• Buscas el orgullo personal de crear algo.
• Independencia y libertad de actuación.
• Realizar un sueño.
• Crear empleo para otros.
• Cumplir con una positiva función social.
• Crear riqueza y bienestar.
• Mejorar tu situación económica.

Pero y a cambio estás dispuesto a:
• Sacrificar tiempo libre y tiempo en familia.
• Aguantar la presión y asumir riesgos.
• Escuchar y recibir consejos, y a la vez, saber comunicar.
• Saber ser realista: ni muy optimista ni muy pesimista.
• Aprender a motivar.
• Aprender a separar lo personal de lo profesional.
• Confiar en las personas que colaboran.
• Optimizar los recursos, organizar y delegar.

Los objetivos empresariales deben desarrollarse a su vez, ¿Qué tipo de empresa puede satisfacer mis necesidades? ¿Qué modelo de empresa me puede llevar a alcanzar el éxito? Y para mí, ¿En qué consiste tener éxito?....Una vez definidos los objetivos hay que buscar el camino que nos lleve al escenario deseado, es decir, ¿cuál es la ruta a seguir? ¿Cuáles son los mecanismos a emplear?

Todas estas dudas hay que tenerlas en mente antes de emprender.

2 comentarios:

  1. Qué buenas ideas, y que innovador artículo.
    Es muy importante el imaginarse donde estaremos, o que proyecto queremos llevar a la práctica y ser felices en el intento.
    Sigo cumpliendo mi promesa!.
    Espero que vos también Vane!
    saludos

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  2. Gracias Lucía!!!
    Yo siempre fiel a tu blog! ;)

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